Syntactically Awesome Stylesheets en resumen «SASS es un preprocesador CSS. Funciona como una extensión de CSS que le permite usar cosas como variables, reglas anidadas, mixins, inline import, herencias y más, lo que hace que el código CSS sea mucho más eficiente.
Entonces, ¿qué es un preprocesador CSS?
En palabras simples, es un preprocesador de CSS te permite escribir pseudo-código CSS para luego será convertido a CSS real. Algunos ejemplos de preprocesador CSS son: Sass, Less y Stylus.
Sass es más estable y potente. fue inicialmente diseñado por Hampton Catlin y desarrollado por Natalie Weizenbaum en 2006. La implementación oficial de Sass es de código abierto y está codificada en Ruby.
Sass es muy útil al manejar grandes hojas de estilo, manteniéndolas bien organizadas y ejecutando con velocidad. Para comenzar a codificar con Sass, debe haber instalado Ruby en su sistema y también debe seguir las pautas de la comunidad de Sass .
¿Por qué deberías usarlo?
Al codificar en CSS, es posible que haya notado que tenía que copiar bloques de código en varios otros elementos para que tengan los mismos estilos personalizados, necesita usar Buscar y reemplazar para realizar ediciones en colores o fuentes en tu hoja de estilo Todos estos son problemas comunes que molestan a todos los desarrolladores serios.
Características notables de Sass
- Sass es totalmente compatible con CSS.
- Es más estable, potente y elegante que CSS.
- Tiene su propia sintaxis y compila a CSS legible.
- Está basado en JavaScript y es un superset de CSS.
- Admite extensiones de lenguaje como variables, anidamiento y mixins.
- Es un preprocesador de código abierto.
- Proporciona muchas funciones útiles para manipular colores y otros valores.
- Tiene una gran comunidad y está bien documentado.
- Utiliza sintaxis anidada.
- Incluye mixins.
- Menos solicitudes HTTP utilizando el atributo @import.
- Mantiene su proyecto de diseño receptivo más organizado.
- Proporciona muchas funciones avanzadas como directivas de control para la biblioteca.
- Proporciona resultados bien formateados y personalizables.
Es posible que algunas líneas repetidas de CSS no parezcan tan importantes para nuestro pequeño proyecto, pero cuando está a cargo de administrar miles de códigos en el mundo real, ya sea para una pequeña empresa o una gran corporación, las cosas pueden ponerse muy desordenadas. Los preprocesadores de CSS como Sass nos ayudan a aliviar ese riesgo y, por lo tanto, son un requisito muy común en muchas de las ofertas laborales como desarrollador web.